Turn On The Light
Tenía un amigo que llevaba una vela en sus bolsillos
y solía tocarla cuando el viento soplaba fuerte.
Supongo lo hacía sentir como si pudiera sacudir al sistema,
y luego se apagó, lo acostamos para que muriera.
Enciendo la luz,
enciendo un millón de brillantes,
cegadoras e incandescentes luces blancas.
Sí, un faro en la noche,
lo mantendré ardiendo sin descanso
hasta que mis fluidos se sequen.
Y construiré un estante de vigas templadas y armazones,
y lo llenaré con un millón de diminutos soles.
Lo colocaré en el techo de mi habitación
y revestiré el piso y las paredes con papel aluminio.
Luego encenderé la luz,
encenderé un millón de brillantes,
cegadoras e incandescentes luces blancas.
Sí, un faro en la noche,
lo mantendré ardiendo sin descanso
hasta que mis fluidos se sequen.
Y arderé como una maldita vela romana,
arderé como un abismo en la noche,
arderé por un minúsculo momento,
éxtasis de la inmolación, incorregible placer.