Ya no puedo darte el corazón,
iré donde quieran mis botas,
y si quieres que te diga qué hay que hacer,
te diré apuestes por mi derrota.
Quítate la ropa, así está bien,
no dejes nada por hacer,
si has venido a comprarme, lárgate,
si vas a venir conmigo, agárrate.
Larguémonos, chica, hacia el mar,
no hay amanecer en esta ciudad.
Y no sé si nací para correr,
pero quizá sí que nací para apostar.
Sé que ya nada va ocurrir
pero ahora estoy contra las cuerdas,
y no veo ni una forma de salir,
pero voy a apostar fuerte mientras pueda.
Larguémonos, chica, hacia el mar,
no hay amanecer en esta ciudad.
Y no sé si nací para correr,
pero quizá sí que nací para apostar.
Ya no puedo darte el corazón,
perdí mi apuesta por el rock & roll,
perdí mi apuesta por el rock & roll,
perdí mi apuesta.
Y es la deuda que tengo que pagar,
y ya no tiene sentido abandonar.
Ya no tiene sentido abandonar,
oh, oh, oh, no, late el corazón.