Temblaron las glicinas, los músicos callaron
Y aquel baile de patio de pronto enmudeció
Una mujer enferma, sin fuerzas, vacilante
Llegando hasta su hombre, de esta manera habló
No vengo a reprocharte tu ausencia de mi nido
Ni a suplicar cariño, lo nuestro terminó
Yo vengo por tu hijo, si es que llegás a tiempo
El pibe se nos marcha, camino del Señor
El pibe, nuestro pibe se nos muere
Vos sabés cómo te quiere
Y llorando me pidió
Decile, decile que yo lo extraño
Que tengo frías las manos y en el pecho mucha tos
El pibe se ha quedado con tu madre
Por favor, no llegués tarde
Si aún querés darle el adiós
Tan solo yo he venido para eso
Corre pronto, dale un beso
Si aún te queda corazón
Del brazo de la otra
Se desprendió el malevo
Y el patio de ladrillos temblando lo cruzó
Y esa mujer enferma, sin fuerzas, vacilante
Siguió tras de sus pasos, soltando un lagrimón
Se oyó La Cumparsita, el tango de los pobres
Tras una nube negra la luna se ocultó
Y fue por vez primera
Que en ese viejo patio
Mientras lloraba un tango
Ninguno lo bailó