Si entre nuestras orillas
existen distancias
antes que el mar nos quite
toda la calma
hagamos este puente amor
los dos con el alma.
Sigamos el camino
que marca tu estrella
yo dejaré de lado
todas mis piedras
para poder juntar así
tu cielo y mi tierra.
Yo buscaré el lucero
de tu firmamento
y encenderé el instante
de nuestro encuentro
la noche que tu nave azul
se quede en mi puerto.
El día que tus ojos
apunten un blanco
quisiera ser el centro
de ese disparo
por eso hace del corazón
la flecha de tu arco.
El día que tu boca
resuma en un beso
la voz de amor que sólo
guarda el silencio
recién tendrá la otra mitad
mi medio universo.
Sabor de tierra virgen
tendrán tus racimos
y si voy a tu copa
me vuelvo vino
y así en tu continente amor
seré el contenido.
En el torrente claro
que tiene tu cuerpo
espero sumergirme
sin perder tiempo
y al fin mojar la arena gris
que hay en mi desierto.