El cielo narra la gloria de Dios
El firmamento anuncia sus maravillas
¡Aleluya, Aleluya
Aleluya, aleluya!
Un día a otro día comunica el mensaje
Susurra una noche a la noche siguiente
No existen sonidos, no se oyen palabras
Más por toda la tierra se escucha el pregón
Allí le han plantado una tienda al Sol
Es como un esposo que del tálamo sale
Es como un atleta entrenado que corre
Y sin fatiga alcanza la meta
Asoma por un extremo del cielo
Y al otro extremo su órbita alcanza
Ninguna criatura podrá
Esconderse de su fuego