Juan Quintero
Señor
Levante su fuerte brazo
Y eche su peso pronto a rodar
Que es propio de caballeros
Ser derribado y el derribar
Que puede haber gallardía
Sin yelmo y sin armadura
Que buen corazón quebranta
Mala ventura
Señor
Si se ha enfrentado a gigantes
Sin más refugio que su querer
Poniendo en cada combate
Tánto valor
Que no hay más que ver
No puede elegir ahora
Dejarse morir un día
Sin más enemigos que la melancolía
Riqueza dignas de verse
Pueden perderse, aunque no la fé
Recuerde lo que se dice:
Más vale un toma, que un te daré
Lo espera su Dilcinea
Y aquél que le está cantando
Su Sancho, su fiel hermano
Pájaro en mano
Y no digo más