La derrota
Por darle rienda suelta a mis antojos,
por no tener conciencia del abismo,
por eso ayer hice llorar sus ojos,
y hoy mis ojos también hacen lo mismo.
Por no medir los pasos que tomaba,
por eso es que he llegado a la derrota,
le hice una traición a quien me amaba,
y ahora estoy como estoy, con mi alma rota.
¿Qué tal, qué tal, qué tal se siente, corazón?
Ahora sí te pegaron.
Es cara, cara, cara la traición,
y al fin te la cobraron.
Por darle rienda suelta a mis antojos,
por no tener conciencia del abismo,
por eso ayer hice llorar sus ojos,
y hoy mis ojos también hacen lo mismo.
¿Qué tal, qué tal, qué tal se siente, corazón?
Ahora sí te pegaron.
Es cara, cara, cara la traición,
y al fin te la cobraron.
Por no medir los pasos que tomaba,
por eso es que he llegado a la derrota,
le hice una traición a quien me amaba,
y ahora estoy como estoy, con mi alma rota.