tuve un amor que era el centro de mi alma
la que en mi pecho en cencio el fuego mas ardiente
era mi dueña era mi vida era mi todo
la consentida con sus berrinches y sus caprichos
sus ambiciones la arrastraron a otros brazos
recuerdo quedan sin apagar todas sus brazas
yo no quisiera aborrecerla no siento rabia
en mi silencio siempre eh de amarla toda la vida
porque el amor siendo tan puro y tan divino
pueda mancharse y luego convertirse en odio
siempre siempre duro
ponte duro duro
te quise tanto y te perdono mi amorcito
tienes derecho a superar tus pretensiones
me duele tanto pero ni modo ya te eh perdido
renuncio a todo que te haga daño soy muy feliz
odio al dinero porque si pudo arrebatarte
alzaste el vuelo por donde no pude alcanzarte
y me dejaste mirando el cielo sin esperanza
amor de pobres aunque sincero no vale nada
porque el amor siendo tan puro y tan divino
pueda mancharse y luego convertirse en odio
Gracias: Luis Cajamarca