Somos bellos, brillantes
polvo de estrellas capaces de tanto y o hacemos lo importante.
Presos del ego que solo nos vuelve pequeños, vulnerables.
Tenemos un alma herida.
Somos débiles, moldeables
sumas que restan mitades en otras mitades.
Ignorantes, por odiar soluciones perfectas a grandes problemas, evitables.
Somos la causa perdida.
Mil preguntas sin porque, misterios sin resolver.
Si para todo hay una razón,
¿qué le digo yo a mi corazón?
Qué caprichosa la vida, que tantas cosas hermosas nos quita y nos da.
Qué caprichosa la vida. Puedes llenarte de fe, puedes buscar tú verdad.
Qué caprichosa la vida, el tiempo convierte en ruina todo lo superficial, qué caprichosa la vida.
Solo depende de ti vibrar de felicidad.
Somos grandes, frágiles, solo seres, materia, energía en el espacio tiempo, arrogantes. Y olvidamos que solo el amor nos convierte en humanos y en iguales.
Somos la especie elegida.
Mil preguntas sin porque, misterios sin resolver.
Si para todo hay una razón,
¿qué le digo yo a mi corazón?
Qué caprichosa la vida, que tantas cosas hermosas nos quita y nos da.
Qué caprichosa la vida. Puedes llenarte de fe, puedes buscar tú verdad.
Qué caprichosa la vida, el tiempo convierte en ruina todo lo superficial, qué caprichosa la vida.
Solo depende de ti vibrar de felicidad.
Somos seres que lloran, que sufren, que dudan, consienten y aspiran a ser diferentes.
Seres que no tienen miedo a entregarse y son valientes para reinventarse.
Parte de algo tan bello, sencillo, importante, escondido, eterno, infinito, impactante.
Somos la esencia, el milagro de vida de un universo que está en nuestra sangre.
Qué caprichosa la vida,qué caprichosa la vida, qué caprichosa la vida. Solo depende de ti vibrar de felicidad.
(Gracias a Noelia V.P por esta letra)