Cuando el mal entró a El Edén
Cuando Dios creó
a la humanidad,
un árbol plantó
sobre el bien y el mal.
Hijo, tuyo es todo
lo que hay aquí;
mas del árbol que
te mostré, prohibido es;
de cierto yo te digo,
si lo tocas, morirás.
Coro:
¡Ay, qué dolor
cuand el mal entró a El Edén!
todo cambió,
al probar el fruto aquel.
¡Qué hermoso hubiera sido el mundo!
¡Vivir por siempre junto a Él!
¡No conocer la muerte no, oh no!
¡Qué triste cuando el mal entró al El Edén!
¡Qué hermoso hubiera sido el mundo!
¡Vivir por siempre junto a Él!
¡No conocer la muerte no, oh no!
¡Qué triste cuando el mal entró al El Edén!
Más grande fue su amor
al enviar a Jesús,
el Unigénito,
quien murió en la cruz.
Intenso fue el tormento
que mi Cristo padeció.
Coro.