Ellos se conocieron
y anduvieron juntos siempre por ahí
en un circo de colores un 27 de abril,
navegaban juntos
en un paraíso hecho de cristal
y bailaban como pulgas,
como peces en el mar.
Tras algunos años,
toda esa bella magia terminó
pues los besos, eran pocos,
la ternura terminó y el buscaba
en otros labios lo que el viento se llevó
tras de la mentiras,
la mentira, ella nunca perdonó
se acaba esta historia,
porque ella era yo.
Y el engaño descubiertó,
nunca perdonó.
Pasarán los días, pasarán amores
hechos de papel, pero nunca olvidaría
a la pulga y aquel pez
El recuerdo de su aroma
yo por siempre… guardaré.