Video La Libreria de Gustavo Almeida 2025 Pop Rock Lyrics

Gustavo Almeida - La Libreria Lyrics

No
Yo jamás pensé en conocer
Alguien tan hermoso como usted
No me atrevo ni a tutearle

Sí
Por favor no se ausente de aquí
Me gusta su forma de vivir
Engrandece el hecho de admirarle

Sé
Que el peligro está en algún lugar
Pero si la vida es caminar
Le suplico estar y acompañarle

Una persona que ansía alzar cada día
Banderas de paz, de nobleza y justicia
Rozando la angustia por no recibir
Un abrazo, un saludo aunque sea

Fuente de mucha riqueza que tengo en el pecho y aún sin pensar
Apuesta por la locura de verme cantar

Locos son los que transforman un sueño en ceniza
Muriendo despacio al vivir muy deprisa
Buscando alegría en abrigos de piel
Amando las penas por poder llorar

Y mientras usted derrochaba alegría
Solo con mirarme en su librería
Cantando y contando historias sencillas
De un hombre normal que sonríe a la vida

No
El Quijote no llegué a leer
De la mancha me brotó la piel
Que se arruga al verle y escucharle

Sí
Por favor si se va usted de aquí
Déme tiempo para escribir
Lo difícil que será añorarle

Sé
Que el peligro está en algún lugar
Pero si la vida es caminar
Le suplico estar y acompañarle

Un Sanador de caballos, casi un Alquimista
Confieso que mi universo conspira
Para que me arrope alguien como usted
Que en Conflictos descubre La tregua

Ensayo sobre la ceguera y le encuentro siguiendo también sin mirar
A este Hombre sin patria que insiste en cantar

Locos son los que transforman un sueño en ceniza
Muriendo despacio al vivir muy deprisa
Buscando alegría en abrigos de piel
Amando las penas por poder llorar

Y mientras usted derrochaba alegría
Solo con mirarme en su librería
Cantando y contando historias sencillas
De un hombre normal que sonríe a la vida

Locos son los que transforman un sueño en ceniza
Muriendo despacio al vivir muy deprisa
Buscando alegría en abrigos de piel
Amando las penas por poder llorar

Y mientras usted derrochaba alegría
Solo con mirarme en su librería
Cantando y contando historias sencillas
De un hombre al que usted le ha entregado su vida