Pongo en tus manos hoy toda mi vida y todo mi ser, oh Maria.
Pongo en tus manos toda mi esperanza y toda mi ilusión, oh Maria.
Y aunque caiga en el pozo más hondo,
sé que Vos me vas a levantar,
Porque yo por Schoenstatt doy todo,
y sé que el Padre me va a escuchar.
Por eso hoy me consagro todo a Vos.
Pongo en tus manos todo mi trabajo y toda mi labor, oh Maria.
Pongo en tus manos todo el sacrificio del día de hoy, oh Maria.
Pongo en tus manos toda mi tristeza y todo mi dolor, oh Maria.
Pongo en tus manos todo el amor que yo tengo por Vos, oh Maria.