Yo siempre te llevaré
oculta bajo el dorso de mi piel
y al mirarme entenderás
que las palabras se pueden hablar
con sólo mirarnos...a...los ojos...
Me acuso por aquella decisión
y es que la duda me supo vencer
es un camino sin vuelta atrás
es un viaje para no volver
es imposible dar la vuelta...
Y mis ojos te hablarán...
Y entenderás...
que yo te llevo clavada en el alma
atravesada como una espada
que se disimula tras figir
la sonrisa perfecta
y con el gesto adecuado
y como siempre ocultando
que necesito respirar
y encontrar un trozo de aire fresco
para poder recuperar el aliento
y poderme desahogar
Y entenderás....
Dejé que se terminara así
porque no hay manera
de esquivar el dolor
y la memoria toma venganza
soplando su sal en mi llaga
y se estremece todo mi cuerpo
y se desploma un telón
de silencio
Me marcharé
y notaré que me tiemblan las piernas
pero que debo guardar la entereza
la manoseada...normalidad,
y morderme la lengua
comprimir la tristeza
y asumir la condena
no te puedo ya tocar
que falso es quedar como amigos
es engañarse y a uno mismo
y es mejor no volvernos...
a cruzar....
Y entenderás...
que yo te llevo clavada en el alma
atravesada como una espada
que se disimula tras fingir
y la sonrisa perfecta...
y con el gesto adecuado
como siempre ocultando
que necesito respirar
y encontrar un trozo de aire fresco
para poder recuperar el aliento
y poderme desahogar
y entenderás...
Y bajo el dorso de mi piel...
Que yo te llevo clavada en el alma...
(Gracias a Esther Aguilera por esta letra)