Al nacer el niño bendecido
Yo sentí en mi alma una ilusión
En mi pecho el tuvo su abrigo
Y en mis manos tuvo su calor
Cuando yo sentí dentro de mi alma
La presencia de su gran amor
En mi vida en el norte fue la calma
Y en mis días no hubo más dolor
Ven, mi buen Jesús
Llena mi vida de tu amor
Calma mis horas de dolor
Mi vida entera es para ti, Jesús
Cuando fui a verlo en el pesebre
La emoción colmó mi corazón
Él nació a fines de diciembre
Lo acunó María con amor
Yo sentí el pálpito divino
Y en sus ojos llenos de fervor
Vi mi vida grande y renacida
Y en mi alma no hubo más temor
Ven, mi buen Jesús
Llena mi vida de tu amor
Calma mis horas de dolor
Mi vida entera es para ti, Jesús