Verdaderamente es digno, es justo, es nuestro deber y salvación
El darte gracias siempre y en todo lugar
Señor Padre Santo Dios todopoderoso y eterno
Por Cristo nuestro Señor:
En él brilla la esperanza de nuestra feliz resurrección
Y así aunque la certeza de morir nos entristece
Nos consuela la promesa de la futura inmortalidad
Porque la vida de los que en ti creemos Señor no se termina
Se transforma
Y al deshacerse nuestra morada terrenal adquirimos una mansión
Eterna en el cielo
Por eso con los ángeles y arcángeles y con todos los
Celestiales cantamos sin cesar el himno de tu gloria
Se la llevó Dios
A la madre de mi alma
Porqué se la ha llevado Dios
Si era por que la quería
Eso lo respeto yo
Se había llevado lo que más quería