Llevo treinta días sin luz
Encerrado en este ataúd
Tumbado soñando en mi celda
Que es mentira, que es una pesadilla.
Un recluso que me mira
Me sonríe y me insinúa
Es mi piel fría y morbosa,
Le seduce, le fascina.
Mentes depravadas,
Adictos de la lujuria
Decadencia corporal
Amantes de la obscenidad!
Otra mente retorcida
Soñolienta de ojos húmedos,
Olor fétido y nauseabundo
Me persiguen, me atosigan.
Ahora estoy ya sin sentido
Metido hasta dentro en el vicio
Las pupilas ya se ocultan
Y ya no sufro, ya no me agito.
Mentes depravadas,
Adictos de la lujuria
Decadencia corporal
Amantes de la obscenidad!