Ella pasó por mi
Como viento fuerte
Soplando el alma
Vestida de amor
En mi eterna suerte
En mi fiebre y calma
Escrito en su piel
Como eternas cartas abandonadas
Ofreciéndo luz
A los que estaban en la oscuridad
Y en su eterna soledad
El corazón és frágil
Delante de esa mujer
Que me entregó la vida
Mucho antes que un ayer
Ella és la dueña
La dueña de la calle
Ella és la dueña
La dueña de mi corazón
Y que no me pida que me calle
Por que ella és la dueña de mi corazón
Y cuando me imagino
Y cuando yo la veo
La dueña de la calle...
La dueña de mi corazón...