Era muy poco en la vida
Tan poco, que nada era
Por no tener, no tenía
Ni madre que lo quisiera
Era un triste aficionao
Que buscaba la ocasión
De dejar encerrao
Frente a un toro, el corazón
Romance de valentía
Escrito con luna blanca
Y gracia de Andalucía
En campos de Salamanca
Embiste, toro bonito
Embiste, por caridad
Morirse me importa un pito
Pues nadie me iba a llorar
Aquí no hay plaza, ni hombre
Ni traje, tabaco y oro
Aquí hay un niño, muy hombre
Que está delante de un toro
En matarme no repares
Te concedo hasta el perdón
Y ya que no tengo madre
La Macarena me ampare
Si me cuelgas de un pitón
Todas las noches saltaba
Sin miedo, la talanquera
Y a cara o cruz se jugaba
Al toro, la vida entera
Quizás fuera colorao
El bure que lo embistió
Y mordiendo su costao
Malherido lo dejó
Adiós, plaza de Sevilla
Ya nunca me habrás de ver
Pisar tu arena amarilla
¡Con tanto que lo soñé!
Adiós, capote de seda
Que fuiste mi compañero
Morir en esta pelea
Es cosa de buen torero
Ya, vestido de alamares
No ha de verme la afición
Y como no tengo madre
La Macarena me ampare
Y me dé su bendición
Y allí quedó ante la fiera
Ninguno le vio caer
Nadie rezó tan siquiera
Ni un padre nuestro por él
Por él ninguna serrana
Lloró de luto vestida
Por él ninguna campana
Dobló amaneciendo el día
Pero, en cambio, entre azucenas
Y entre velas erizas
En San Gil, la Macarena
Sí que lloraba de pena
Por la muerte del luchador