De madrugada cuando todo parecía estar en calma, cuando el sosiego se inundaba en su existir
Y se veía un gran temor allá en la barca, pues a lo lejos se veía un resplandor
Hubieron vientos y se juntaron para ver que sucedía y alguien gritó, es un fantasma que venía
Más a lo lejos se escuchó una voz decir
Yo soy Jesús, que cuando digo al viento calma, él se calma
Yo soy Jesús, que las tinieblas resplandecen por mi luz
Y al comprender, que era Jesús que caminaba por las aguas
Hubo confianza, hubo paz allá en la barca, oye Jesús sé tú mi ancla
Ya no voy solo, por los mares de este mundo navegando
Ya no hay naufragio, pues los vientos obedecen a su voz, y voy
Confiado, pues a lo lejos escucho una voz decir
Ya no voy solo, por los mares de este mundo navegando
Ya no hay naufragio, pues los vientos obedecen a su voz, y voy
Confiado, pues a lo lejos escucho una voz decir