Como cuchillo en la mantequilla
Entraste a mi vida cuando me moría
Como la Luna por la rendija
Así te metiste entre mis pupilas
Y así te fui queriendo a diario
Sin una ley, sin un horario
Y así me fuiste despertando
De cada sueño donde estabas tú
Y nadie lo buscaba
Y nadie lo planeó así
En el destino estaba
Que fueras para mí
Y nadie le apostaba
A que yo fuera tan feliz
Pero cupido se apiadó de mí
Se apiadó de mí
Se apiadó de mí
Como la lluvia en pleno desierto
Mojaste de fe mi corazón ahogaste mis miedos
Como una dulce voz, en el silencio
Así nos llegó el amor, amor del bueno
Y así te fui queriendo a diario
Sin una ley, sin un horario
Y así me fuiste despertando
De cada sueño donde estabas tú
Y nadie lo buscaba
Y nadie lo planeó así
En el destino estaba
Que fueras para mí
Y nadie le apostaba
A que yo fuera tan feliz
Pero cupido se apiadó de mí
Se apiadó de mí
Y nadie le apostaba
A que yo fuera tan feliz
Pero cupido se apiadó de mí
Se apiadó de mí