Soy quien llora en el umbral
Quien gime en soledad
Quien no tendrá un abrazo ni caricias nunca más
Que todo vaya bien
Disculpa mi rencor
Pero es tan duro ahogar lo que me dicta el corazón
Vuela exhausto bajo una cruz
Rosa amarga, fiel pulcritud
Ahora desearía, apresar el tiempo en un baúl,
Que esto no suceda y aislarte de la muerte
¡Me niego a que seas el mártir de sus deseos!
Soy quien llora en el umbral
Quien gime en soledad
Quien no tendrá un abrazo ni caricias nunca más
Que todo vaya bien
Disculpa mi rencor
Pero es tan duro ahogar lo que me dicta el corazón
Veo tu cara ¡vislúmbrame!
Perla clara que emana sed
La arena molesta, el pasillo se hace inmensidad
Maniatada el alma, la furia condensa más tu fe
¡Vuelve cielo a los brazos de tu triste madre!