Ã?l salió y dejó la casa vacÃa
y se entregó al suave aire del desierto.
Entonces la vio,
la luna roja,
Sobre el Mar Negro,
luna roja.
Primero león, luego cordero,
ruega a Dios
poder volver del desierto.
Desde que vio
la luna roja,
Sobre el Mar Negro,
luna roja.
CuÃdame, yo te cuidare,
yo también pagué placeres ciegos.
Y no quiero ver
la luna roja,
Sobre el Mar Negro,
luna roja, luna roja.
Te hace mortal.
Luna roja.