Dame crack y llámame puta.
Dame crack y llámame puta.
Te hago lo que quieras por un poco de crack.
Ya no tengo pulmones, ya no tengo cerebro,
pero tengo boca y manos, y un magnífico trasero.
Y trabajo a conciencia por delante y por detrás.
Paseo por las sombras dando tumbos con el mono.
Por un poco de crack te puedo hacer de todo.
Se me ha corrido el rimmel y movido la peluca,
¡cuánta lujuria en una sola puta!
Te veo en una esquina dentro de tu gabardina,
me apoyo en tu hombro y digo: "chico, estás de suerte,
no sabes las cosas que yo podría hacerte".
Y me miras y sonríes, pero yo ya estoy muy seria,
porque noto tu revólver dentro de mi oreja.
Por fin he comprendido que no habrá más crack,
y cuando oigo el clik no habrá más crack.
Y me pregunto qué se siente cuando dejas de pensar.