Salve, oh Reina del cielo
Puerta del paraíso, salve
Tú traes al mundo la esperanza
Tú traes al mundo la paz
Tú que al Señor acogiste
En la humildad de tu casa en Nazaret
Y en tu seno engendraste
A Jesucristo el Señor
Santa Madre de Dios y nuestra
Toda gracia en ti resplandece
Nos acoges siempre en tu casa
Y con fe recurrimos a ti
Puerta del cielo admirable
Alta torre, baluarte noble
Inexpugnable fortaleza
Arca radiante de luz
Tú, de los santos la gloria
Y la alegría del coro de ángeles
Danos tus alas de esperanza
Alas de gracia
Santa Madre de Dios y nuestra
Toda gracia en ti resplandece
Nos acoges siempre en tu casa
Y con fe recurrimos a ti
Signo de amor y de gracia
De la Iglesia perfecta imagen
Del pecador dulce refugio
Eres nuestro auxilio
Del navegante la estrella
Nada teme al que ti se acoge
En la tormenta de la vida
Puerto seguro
Santa Madre de Dios y nuestra
Toda gracia en ti resplandece
Nos acoges siempre en tu casa
Y con fe recurrimos a ti
Madre de amor y consuelo
Cuando el dolor y la angustia acechan
Vuelve a nosotros tu rostro
Tu rostro lleno de amor
Fuente de paz es tu casa
Y salvación para cada hombre
Para quien busca un refugio
Calma, quietud y reposo
Santa Madre de Dios y nuestra
Toda gracia en ti resplandece
Nos acoges siempre en tu casa
Y con fe recurrimos a ti
Gloria al Padre que crea
Y al Hijo que salva al mundo
Gloria al Espíritu Santo
Ahora y por siempre
Amén. Amén. Amén