Pituca cree que es el mejor,
el mejor culo para su sillon
y sabe bien que hoy su chance es gorda.
Le ha puesto, al fin, su nombre al toallon;
compro marfiles de la selva del Congo
y en su coco siempre hay un petardo.
Rodeado de grandanesas
que se salen de la blusa
con bestial dulzura, rouge y risas de Baron B,
asi Pituca se la cree...
Aun ayer no ligaba el amor
y no enceraba nunca el baston
su boca olia como un cenicero.
Tuvo un golpe de audacia y se dio
de timbero fogoso y feroz,
de los que nunca muestran todo el mazo.
Y hoy come la gran manzana
y no deja ni pepita,
usa sal de melodrama, pero sin abusar.
Y así Pituca se la cree...