Después de un año largo, ya pasando malos tragos,
en el que una guerra absurda ha causado estragos.
El rap se ha convertido en moda para vagos, hijos de puta quieren desvelar el truco de éste mago.
¿Sabéis de lo que hablo? De lo que hago. Aún sin haberme visto nunca, soy leyenda. Y aunque no venda éste mes un monstruo como Ness en el lago,
pago por ver crucificado a algunos de esos personajes que Superpop ha creado y que creen que han rapeado.
Cualquiera con síndrome de down, down, down, se lo habría papeado. Pa' mí que la han cagado, por eso B-Boy de carne y hueso desde aquí arriba hemos demostrado que esa gente valen en mierda su peso. El príncipe de los gatos empieza a ser consecuente, porque gente absurda a la que todos odiamos seguramente.
No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'. No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'.
Aparte, el rap ahora da pasta, y empresarios como buitres, en 2003, fuistéis, sentistéis, hicistéis lo que quisistéis, y hundistéis en la mierda maxis, LP's y mixtapes. No repetiréis, como véis,
el rap os ha vencido en este duelo, y éste que viene desde un terreno ajeno, os hace decir 'qué bueno que vuelo', y el suelo tan lejos de sus pies.
Así pues, con Artes y Yulian entreno, sin freno, y no temo a ningún otro rapper porque lo quemo. Rapeo en salas que presentan llenos, y creo que no tenemos nada que envidiar a los grupitos yankies, viendo que algunos sólo por la pasta vienen hasta aquí. Tú tranqui, sigue adorando al friky que hizo el mangui. Estilo kinki, se quedó con el dinero en esa party, lo mejor en el concierto de Prince es Pataki. Lo peor que me temo que es eso lo que quieres, Paninni.
No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'. No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'.
Televisiones, instrumento antieducación. En ésta orquestación, banda sonora de ciencia ficción, donde un cabrón con bigotón repite un son
en el que dice que va bien esta nación.
¿Dónde está la camara oculta, campeón? En un año en el que la acción de inclinación con inmersión
de un inofensivo barco tras colisión, hizo que el marco de expansión del prestigio de éste país se hundiera. Y a la carrera no sumó por invadir otro país, y la guerra se consumó mientras patriotas
besaban en Colón la gran bandera.
El colofón que me inflamó las pelotas, coacción que queda impuesta, represión tras la respuesta de protesta en la única ocasión en que por fín se manifiesta España entera. Luego la desilusión tras escrutinios, si nadie vota al PP, cómo puede ser que como cromos un niño tenga tanto voto repe, y tanto tonto trepe hasta el más alto escalafón.
Y mientras tanto, el más tonto de operación venda un millón con porquería de canción de bulería cutre, son pa' discotecas.
Mientras, niñas viven en el país de las maravillas, como Alicia. Chicos problemáticos, sin ilusión, contemplan como su naríz se vicia. Maridos asesinos son noticia, marujas viven solamente a expensas de la boda del príncipe con Leticia. Y famosos de mentira, con pericia, venden en primicia vidas a cual más horteras. Nosotros recorremos carreteras por España con un directo infinito e invecible, haciendo que el Hip-Hop sea diferencia entre creíble y no creíble.
Artistas pop que cantan rap, no son creíbles.
Políticos en guerra en nombre de la paz, no son creibles. Terroristas que matan en nombre de la libertad, no son creibles. Amantes del Hip-Hop, son increíbles.
No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'. No me creo na' de lo que dices, no me creo na' de lo que enseñas. No me creo na' de lo que escribes,
lo que piensas, lo que sientes, lo que sueñas,
de todo lo que vives no me creo na'.