Tirado en un cama,
muriendo lentamente como si nada.
Sudando este hielo seco que tira mi veneno;
llorando balas, sigo Sano!
Bailando como en un palacio, bailo.
Bailan! Cantando cosas viejas;
ya no Llano!
Ya no necesito Nada que me duela!
Bailo!
y se derriten tus miradas.
Caigo!
y se destiñen como sombras viejas
Juego!
a sentirlas cerca de mi pecho,
a sentir las olas y los mares,
las gaviotas y los mares,
que me dicen;
como dicen, digo: Eh! eh! ehh!
Corro!
sin saber a donde ir
Cuento!
sin horas ni reloj
Lloro! desarmado en mi pecho
como el pajaro que pica su tripa;
vuela para arriba,
muere en una zanja;
como el ser que duerme,
como en una paja; digo: Eh! eh! ehh!