Tenias la costumbre
De andar por los senderos
Cantandole a la vida
Tus ganas de querer
Encendias el alb
Con un sabor a mate
Y acostabas estrellas
En el anochecer
Que extraña hechiceria
De duendes encantados
Corrian por tus manos
Nunca lo hare saber
Jugabas en tus dias
Que eras dueña de todo
Hada, peona y mensuala
Para todo quehacer
Todavia te veo
Con el hombre a tu lado
Porque era un trozo tuyo
O eras un trozo de él
Y en ese complemento
Hombre, surco y semilla
Siempre fuiste la tierra
Enseñando a nacer
Despues fuistes un árbol
Dando sabia a sus gajos
Cada gajo fue un grito
Que tu vientre gritó
Cinco gajos que buscan
El altar de tu frente
Pa' rezar en silencio
Uno de esos soy yo
Son tus hijos que buscan mamá
El altar de tu frente mamá
Pa' rezar en silencio mamá
Uno de esos soy yo