Los que nunca han querido
los que nunca han amado
ya no están conmigo
desde que tu olvido
me dejó llorando.
El mejor barrilete
que yo tuve en las manos
en aquel domingo
al cortar el hilo
se me fue volando.
Los que no me comprenden
y se van de mi lado
no conocen de amor
de dolor ni de llanto.
Y yo sigo pensando
que el sabor de tus labios
era un barrilete
que en aquel domingo
se me fue volando.
Los que se han convencido
que el amor ya no existe
dicen que tu olvido
no es ningún motivo
para verme triste.
A pesar de estar vivo
no levanto los brazos
porque tu partida
me dejó la vida
hecha mil pedazos.