Al final del final, donde ya no llega el mar,
las noches se queman, la luz nunca se va.
Cuando vamos a parar.
El camino no va dónde tu quieres llegar,
como Jack Kerouac, siempre contra el viento.
Aquí nunca es buen momento.
Nómadas sin ciudad, cansados de esperar,
mira la carretera, ves los días pasar,
cuando vamos a parar.
No hay canciones en la radio que hablen de lo que soñamos.
No hay futuro, ya ha pasado, el presente no se ve.
Nunca vamos a volver.
La distancia nos acerca.
Te sientes vivo, en el andén.
Esa sensación de no haber perdido tu tren.
No me preguntes por qué nunca vamos a volver.
Te sientes vivo en el andén, las cuerdas rotas lo saben bien.
Te sientes vivo en el andén, esa sensación de no haber perdido tu tren.