De un dulce ser tas enamorao
no puedes vivir della separao
no es una mujer ten mucho cuidao
o acabarás loco destrozao.
Huérfano de la suerte
el desprecio te envenena
frío temple de la aguja
traspasa ahora tus venas
tu sangre sabe a muerte
y ya na ni naide
y ya naide ni na vale la pena.
Día a día te puedes ver
en tu espejo encantao
cuanto más bello puedas parecer
ella te habrá secuestrao.
Huérfano de la suerte
el desprecio te envenena
frío temple de la aguja
traspasa ahora tus venas
tu sangre sabe a muerte
y ya na ni naide
y ya naide ni na vale la pena.
Con el alma enegrecía
y las pupilas contraías
a tol mundo maldecías
viendo tu cuerpo como moría.
Habrás muerto sin fallecer
y el alma te habrá robao
has perdío sin saber
to lo que te han quitao
toavía puedes escoger
porque este bello cuento
esta dulce historia no ha terminao.