Tus caricias de cuero me emocionan;
me torturas siempre en la bañera;
destrozarte la pipa es mi ilusión;
¿quieres sangre? yo te la voy a dar.
Cuánto disfruto
haciendo el animal
y escuchando tus gemidos.
Quiero ver cómo
llegas a tu final
y escuchando tus gemidos.
Esta noche saliste de movida;
vas a la calle muy provocativa;
léntamente me acerqué con disimulo;
mi cañón se abre paso entre tus piernas.
Cuánto disfruto
haciendo el animal
y escuchando tus gemidos.
Quiero ver cómo
llegas a tu final
y escuchando tus gemidos.