Si me hablaran las estrellas
y el millón de nebulosas
entregara el parecer,
sobre tantas ijusticias
que cundieron desde ayer;
si me hablara el firmamento
si entendiera mi lamento...
Escribiría un cometa
sobre aquel fondo celeste,
como invencible poeta
quemando el odio, valiente ruiseñor;
escribiría que el mundo
clama por amor.
De pronto rayos y truenos
denunciarían la oculta impunidad,
vindicarían de insulto
en
plena libertad...
Si me hablaran las auroras
y el cantar de amaneceres
entregara su opinión
sobre mi causa perdida,
sobre absurda desunión;
si me hablara la tormenta
que implacable y gris afrenta...
Escribiría un cometa
sobre aquel fondo celeste,
como invencible poeta
quemando el odio, valiente ruiseñor;
escribiría que el mundo
clama por amor.
De pronto rayos y truenos
denunciarían la oculta impunidad,
vindicarían de insulto
en
plena libertad...