Distancia que traes distancia,
cencerro de mi lucero.
Galopié por tantas huellas
que ahora hasta me les parezco.
Retorcidas de apariencia,
pero con destino cierto.
Distancia que resucita
después de haberla alcanzado.
No hay caballo que te gane,
ni hombre que te haya pialado.
Si antes nos parecimos
hoy no puedo asegurarlo.
Que poco nos parecemos,
que poca es la diferencia.
Vos seguís y yo me quedo,
vos sos tierra y yo soy tierra.
A vos te abrieron mis pasos,
y fuiste pa que yo fuera.
Bien haigale el parecido
parecer que no existiera.
Montón de leguas echadas,
como al vuelo la semilla.
Encare si reculaba,
y güascazos de costilla.
Bien haigale el parecido
cuando he caído de rodillas.
Montón de leguas echadas
se las pasa por arriba...