Era un ciego
Y ese torpe lazarillo
Que me guiaban
Se llamaba corazón
Fue por eso mi caída
El derrumbe de mi vida
Y para más herejía
La inconstancia con tu amor
Era un ciego
En mi afán de los veinte años
Y mis culpas
Se llamaban ansiedad
Ansiedad que mis amores
Fueran muchas muchas flores
Y encontré solo rigores
En lugar de mi ansiedad