Llegaba en coche
A la ventana de la moza
Y se embriagaba
Con glicinas y jazmines
Traia un ancia
De zorzal en los cantores
Ponía el alma
En las guitarras y violines
A la hermosura quinceañera
Le dejaba
El homenaje
De su acento y de su amor
Y se alejaba
Con el premio de un suspiro
Una sonrisa
Un muchas gracias
Una flor
En la lejana noche
Fue canción de amor y fe
En la vidala fue el dolor
Del mozo trovador
Con habaneras
Vino al barrio a suspirar
Y al claro de la Luna
Su farol de plata
Le pidió a la ingrata
Que supiera amar
La linda moza loca
Dejara al son de la canción
Habría el alma y hierba
Componiendo su soñar
Y florecia la esperanza del cantor
Al ver que la sonrisa
De la porteñita
Era una infinita
Promesa de amor