Te ves, me ves, te veo, pues,
es hora de pedir un favorcito al destino.
Tenés el don de sonreír,
yo sola me ahogo en un vasito al no poder tocarte.
¿De dónde nace tanta necesidad de control?
Si suelto, suelto, sé que sólo fluye el amor.
Oh, oh, oh, no sos vos, soy yo.
No soy yo, sos vos.
No importa quién es quién,
quiero dejarlo ser.
Quisiera ser un pájaro
volando por ahí, sin preocuparme por lo que venga.
Yo sé muy bien que si me ves
contenta y alegre abrimos paso a un mismo norte.
¿De dónde nace tanta necesidad de control?
Si suelto, suelto, sé que sólo fluye el amor.
Oh, oh, oh, no sos vos, soy yo.
No soy yo, sos vos.
No importa quién es quién,
quiero dejarlo ser.
Oh, oh, oh, no sos vos, soy yo.