Aún recuerdo los días de angustia
Y de largos silencios
Tu mirabas desnuda a que se yo
El dolor inundaba tu cara, y como un miserable
Apuraba mi vaso de whisky, borracho de amor
Tu sabías como me las gastaba
Antes de conocerme
Mi guitarra, el bourbon y la noche eran mi devoción
Y es que en cada rincón de tu cama
Dejé mil promesas
Pero nunca llegaba la hora para darte calor
El culpable fui yo, de tu llanto y tus ojeras
La culpa la tuve yo, de tus miedos y tus penas
Pero hay algo más fuerte que tira,
Y me cuenta mentiras, y me empuja hacia la soledad
Siempre que tú no estás
¿Cómo hacerte creer que lo has sido todo en mi vida?
Si he llegado cien veces con aroma de cualquier mujer
Yo te juro que en mis noches de amor
Sin querer te he nombrado
Y esperaba encontrarte a mi lado a la salida del sol
¿Cómo voy a esperar que perdones lo que hice contigo?
Pero no soy cobarde y acepto un castigo cruel y feroz
Reconozco que he sido el verdugo de tus sentimientos
Y no puedo ocultar que merezco de largo tu adiós