Después de un crudo invierno ha florecido
el jardín de mi vida con tu amor
con la luz de tu sonrisa, flor de aurora
perfumaste otra vez mi corazón.
Y de mi alma una nueva primavera
se ha poblado de trino mi existir
y en el cántaro fresco de tu boca
la miel de la pasión mujer bebí.
Que nada jamás nos separe
dueña de las bellas horas
de miel y luna que compartimos
en esos tus ojos dulces quiero mirarme
por siempre amor, mi gran amor
por siempre amor.
Tenerte hoy a mi lado es como un sueño
del que nunca quisiera despertar
estoy tocando el cielo con las manos
me da miedo tanta felicidad.
Mi canción es una rama florecida
que ha brotado del milagro del amor
y su fruto será el dulce fruto
de la felicidad para los dos.