No me mires a los ojos
que vas a prender
en mis venas una hoguera
y no quiero arder,
no me roces con tus labios
que jamás podría
liberarme del encanto
de tu aroma de mujer.
No descubras tu cintura
que voy a perder
con tu cuerpo la cordura
y no quiero ser
ese amante que suspira
por hacerte mía,
por no hacer caso a la gente
cuando me decía...
No te enamores nunca
de una mujer gitana,
escapas del hechizo
que encierra su mirada,
no te enamores nunca
de una mujer gitana
que bastan dos suspiros
para que empieces a amarla
y ya nunca la puedas dejar.
No me mires a los ojos
que vas a prender
en mis venas una hoguera
y no quiero ser
ese amante que suspira
por hacerte mía
por no hacer caso a la gente
cuando me decía...
No te enamores nunca
de una mujer gitana
no escapas del hechizo
que encierra su mirada.
No te enamores nunca
de una mujer gitana
que bastan dos suspiros
para empezar a amarla.
Yo se que si me mira
puedo perder el alma
yo se que si me besa
jamás podré olvidarla.
No te enamores nunca
de una mujer gitana
que bastan dos suspiros
para empezar a amarla,
para empezar a amarla.