Dos cafés, dos butacas cómodas y la gente abarrotando el bar,
es fantástico estar montándonos un mundo para los dos.
La verdad me parece mágico, tu y yo tachando a los demás
los dos solísimos en un mundo que prohíbe la soledad.
(estribillo)
Una historia distinta, un amor diferente,
solos los dos rodeados de gente, solos los dos,
una historia distinta, un amor frente a frente,
un paraíso inventado en la mente del corazón.
Y volamos por el cielo desde el suelo del local
y las mesas y las sillas son las nubes
y los vasos son estrellas y la lámpara es el sol
y Eva y Adán tu y yo.
Quedará en nuestra memoria esta isla fabricada en un bar
tan atípica, tan romántica, como un recuerdo especial.
(estribillo)