Madrid - Buenos Aires
En cuanto vi su silueta,
supe que por ella perdería la cabeza.
Dos pasajeros en tierra,
que el destino se dejó en lista de espera.
Y a diez mil pies sobre el mar el mundo daba igual
bajo sus ojos negros.
Cuando el cielo se puede tocar, hay que volar,
y no mirar al suelo.
Maldita realidad, (maldita realidad,)
que nos baja de las nubes a una fría terminal.
No la he vuelto a ver más, no la pude olvidar,
y me perdí en San Telmo tantas noches al azar.
Voy sin billete de vuelta,
mi corazón entre deseo y turbulencias.
Buscando la coincidencia
de que nos junte caprichosa una reserva.
En un vuelo Madrid - Buenos Aires la encontré,
y se detuvo el tiempo.
"Abróchense los cinturones", cuando la besé,
y no te cuento el resto.
Maldita realidad, (maldita realidad,)
que nos baja de las nubes a una fría terminal.
No la he vuelto a ver más, no la pude olvidar,
y me perdí en San Telmo, tantas noches al azar.
Maldita realidad,
que nos baja de las nubes a una fría terminal.
No la he vuelto a ver más,
y me perdí en San Telmo tantas noches.
En cuanto vi su silueta,
supe que por ella perdería la cabeza.