De caminar descalza
De adivinar estrellas
De dibujar con sangre
De mi pasar las huellas
Y de clavarme cruces, para creer.
De ver crecer escarcha
sobre la piel ajena
y de enterrar fantasmas
bajo la tierra negra
y de tragar cenizas, para engendrar.
Ay, tan cansada de andar
por este Limbo atroz
espectro fiel
que nadie ve
que nadie quiere ver.
De revolver la nada
De desafiar tormentas
De envenenarme el alma
Con esperanzas muertas
De ver nacer mis alas
Y no volar.
Y de cambiar de casa
de equivocar las puertas
y de beber mis lágrimas
de miedo o de vergüenza
de no encontrar palabras, para mentir.
Ay, tan cansada de andar
por este Limbo atroz
espectro fiel
que nadie ve
que nadie quiere ver.