Yo ambicionaba un paraíso
Para ti
Eres el ángel
Que merece estar ahí
Yo ambicionaba
Una gran gloria
Entre los dos
Que bendijera permanente
Nuestro amor
Te llevaré a un rinconcito
Muy lejano
Donde no llegue
Ni la sombra del dolor
Allá en la selva
Del confín pampeano
Donde tiene
Su trono el ruiseñor
Vuela gentil mariposa
Que saltas de flor en flor
Libando dentre las rosas
La esencia de nuestro amor
Vuela gentil portadora
De mi sentida canción
En busca de nueva aurora
Que mitigue mi dolor
Y más quisiera
Que la gloria de mis sueños
No la tuviera jamás
Ningún bendito
Una mujer
Que en su mirar risueño
Lleva en sí
La placidez del infinito
Y en aquel nido
De bellezas y primores
Te adoraré
Con el fervor
De mi ilusión
Como se adoran
En sus nidos seductores
Los zorzales, las calandrias
Y el gorrión