Yo se que tienes celos de mi guitarra.
Yo se que lloran tus ojos
cuando me ves abrazarla... Si.
Yo se que tienes niña, herida el alma.
Yo se que por las noches cuando te marchas
cruzas llorando mi patio
como una luz que se apaga... Si.
Yo se que tienes niña, herida el alma.
Yo se muy bien que te has sentido feliz
sentada junto a mi hoguera
dejando tu primavera pasar.
Y se también lo mucho que me has querido
y alguna vez he sentido, dolor.
Yo se que tienes celos de mi guitarra.
Yo se que tiemblan tus manos
cuando me ves abrazarla... Si.
Yo se que tienes niña, herida el alma.
No puede ser, mi adolescencia pasó
dormida está como un niño
entre unos libros que nunca aprendí.
Recuérdame, y vive tus quince años
yo te prometo soñarlos. Adiós.