Solamente una palabra, solamente una oración
Cuando llegue a tu presencia, oh, Señor
No me importa en que lugar, de la mesa me hagas sentar
O el color de mi corona, si la llego a ganar
Solamente una palabra, si es que aún me queda voz
Y si logro articularla, Tu presencia
No te quiero hacer preguntas, solo una petición
Y si puede ser a solas, mucho mejor
Solo déjame mirarte cara a cara
Y perderme como un niño en tu mirada
Y que pase mucho tiempo, y que nadie diga nada
Porque estoy viendo, al maestro cara a cara
Que se ahogue en mi recuerdo, en tu mirada
Quiero amarte en el silencio, y sin palabras
Y que pase mucho tiempo, y que nadie diga nada
Solo déjame mirarte cara a cara
Solamente una palabra, solamente una oración
Cuando llegue a tu presencia, oh, Señor
No me importa en que lugar, de la mesa me hagas sentar
O el color de mi corona, si la llego a ganar
Solo déjame mirarte cara a cara, aunque caiga derretido en Tu mirada
Derrotado y desde el suelo, tembloroso y sin aliento
Aún te seguiré mirando, mi maestro
Cuando caiga entre tus plantas, de rodillas
Déjame llorar pegado a tus heridas
Y que pase mucho tiempo, y que nadie me lo impida
Que he esperado este momento, toda mi vida