Puerto hacia islas que antes has soñado
ropa en el viento tendida.
Gente que mira a los ojos despacio
mientras finge estar dormida.
Duerme Lisboa lugar de la luz blanca,
lugar de los encuentros del corazón y el mar.
Quien te visita conoce su destino,
ciudad de los amantes que saben naufragar.
Haces presente el tiempo de la infancia
magia de las calles perdidas.
Bebe, viajero el vino verde y limpio
de toda la melancolía.
Duerme Lisboa lugar de la luz blanca,
lugar de los encuentros del corazón y el mar.
Quien te visita conoce su destino,
ciudad de los amantes que saben naufragar.
Si alguna vez nací, nací en Lisboa.