Tienen un fulgor de pasión
Los ojos del compadrón
Ella cimbrea sensual las caderas
Y en ansia de fiera se prende al varón
Y la va arrastrando, arrastrando
Con sus sollozos el bandoneón
Y al compás siguen dormidos
Con los latidos del corazón
Este es el tango de mi tierra
Toda pasión en él se encierra
Se sienten ganas, al bailar
De reír y de llorar
El que se baila en la cortada
Y que termina a puñaladas
Se sienten ganas, al bailar
De querer y de matar
Arde en llamarada procaz
La mina en el baile audaz
Y va encorvada en una corrida
Poniendo la vida en cada compás
Hasta que, vencida, se entrega
Toda temblando de amor sensual
Y el derecho de amo nuevo
Sella el malevo con el puñal