Vuelve a cantar, vuelve a cantar,
que el tiempo se nos va.
Canta otra vez, canta otra vez,
que el tiempo se nos fue.
Soñé una vez que había un reloj
colgando en el vacío
que recogió como un imán
todo el tiempo perdido.
Era el tiempo mi obsesión,
mi entraña, mi castigo.
Era el tiempo, no el amor,
cantando en mis oídos
su canción.
Pero una vez sentí crecer
el día junto conmigo,
y fue esa vez que lo atrapé
con los cinco sentidos.
Era el tiempo, corazón,
más largo que el olvido.
Era el tiempo del amor
cantando en mis oídos
su canción.
El tiempo se nos va,
el tiempo se nos fue.